Entre los casos de uso más comunes en el Internet de las Cosas (IoT) están las soluciones de seguimiento de activos. Tanto en el ámbito privado como en el empresarial, la capacidad de rastrear activos es de suma importancia y ofrece muchas ventajas. Los consumidores, por ejemplo, pueden rastrear a sus mascotas con rastreadores de mascotas o activos como bicicletas con rastreadores de protección contra ladrones. Ejemplo de esto es la manera en que Nabi ha utilizado esta solución. En las empresas, el seguimiento de activos es especialmente importante para los activos de alto valor como los coches y otros vehículos en las soluciones de gestión de flotas, pero también en logística cuando se transportan mercancías.